El GL es utilizado a nivel mundial para la industria, el transporte y para fines residenciales (agua caliente sanitaria, cocina y calefacción).
Hoy en día también está siendo combinado con energías alternativas, como la eólica y solar, contribuyendo a reducir el impacto de la contaminación atmosférica y apoyando de esta manera al desarrollo sustentable de nuestro país.